domingo, 12 de septiembre de 2021

LO QUE DIJO LA COMUNIDAD INTERNACIONAL SOBRE LOS ARBITRARIOS JUICIOS POLITICOS CONTRA EL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ

Hablemos con propiedad y según los datos de la historia pasada y reciente del Perú: El mayor y primer genocida de la historia del Perú fue Francisco Pizarro (asesinó 10 millones de indígenas) El segundo mayor genocida de la historia del Perú es Francisco Rafael Sagasti Hochhausler (con más de 110 mil muertos en su haber durante la pandemia y en una gestión presidencial corta de poco más de 8 meses). El tercer mayor genocida de la historia del Perú es Martín Alberto Vizcarra Cornejo (con más de 85 mil muertos en su haber en esta pandemia y en un mandato presidencial de poco más de tres años y medio). El cuarto genocida ( para el documental no lo es ) de la historia del Perú es Rubén Manuel Abimael Guzmán Reynoso que según la CVR le atribuye el 54 por ciento de las víctimas de la guerra interna que dejó un saldo de 69,280 muertes, es decir 37,411 (y no como algunos enfermos quieren atribuirle cientos de miles, no señor, la CVR no habla de cientos de miles) cifra que es cuestionable porque como sabemos la CVR fue una instancia arbitraria organizada por los caviares para congraciarse con la derecha eructadora, para estigmatizar y atizar el terruqueo (el informe del a CVR no menciona el terrorismo de Estado dirigido contra la población en las gestiones de Belaunde, García y Fujimori, prefiere hacerles concesiones y no llamar por su nombre a dichos actos) y para que entren con fuerza sus ONGs a llenarse los bolsillos con el negocio de la pobreza y el supuesto interés por las victimas de dicho acontecimiento ocurrido en el Perú de 1980-1992. Aún no se ha determinado si realmente todos los atentados fueron realmente de Sendero Luminoso o fueron efectivamente la Marina de guerra del Perú disfrazada de senderistas. De modo que le correspondería al presidente Pedro Castillo promover una verdadera comisión de la verdad que nos diga la VERDAD de lo ocurrido en el periodo de 1980-2000. Es cierto que es condenable Guzmán, y los actos terroristas que escaparon de sus manos debido al desviacionismo y la escasa formación de sus militantes partidarios. Pero aquí hay algo que se debe aclarar: los juicios contra la cúpula del Partido Comunista del Perú fueron JUICIOS POLITICOS. Como tal, no son juicios que respeten los principios jurídicos ni el ordenamiento jurídico nacional ni internacional sino en base al abuso del derecho y de la autoridad. Guzmán, que falleció ayer a las 6:40 am y que ya no es terrorista ni pesa sobre él ninguna pena debido a que se extinguió la ejecución de la pena con su muerte (revisar el artículo 85 del código penal), como se sabe, fue enjuiciado por un tribunal militar y por jueces sin rostros. Fue un juicio arbitrario que la dictadura terrorista de Estado de Alberto Fujimori por todos los medios no permitió que se lleve a cabo conforme al derecho internacional y a los convenios sobre derechos humanos y con la presencia de observadores internacionales extranjeros e imparciales (de esto habla el Documental). El objetivo de la dictadura fue meter preso por cadena perpetua al Partido Comunista del Perú y no reconocerle ningún derecho pese como sabemos Fujimori (el quinto genocida de la historia del Perú, en la práctica este japonés mató más que Guzmán CVR oenegera) fue enjuiciado respetándose todos los principios jurídicos y democráticos con 25 años de prisión.

El fallecimiento de Rubén Manuel Abimael Guzmán Reynoso, el líder del partido comunista del Perú ha sido tendencia en los medios y las redes sociales, pero el cargamontón se hizo visible en todos los medios de comunicación chatarra, usando adjetivos que ya no asustan a nadie porque no hay terrorismo desde 1992, año en el que fue capturado por el GEIN, alias los tontos útiles porque el país sigue siendo la misma mierda y el abandono del Estado sigue presente. Después de esa fecha la derecha antipolítica utilizó el terrorismo para sembrar temor en el pueblo y justificar la represión contra dirigentes, organizaciones sociales y el pueblo en su conjunto y para acrecentar la corrupción hasta niveles exorbitantes. La prensa chatarra prefiere atizar el terruqueo ahora con la muerte Guzmán, pero no ventila los 23 mil millones de soles que cada año pierde el país en corrupción, dinero que hubiera servido para solucionar los problemas del país. En varios rincones del mundo se ha mostrado la solidaridad con el Partido Comunista del Perú por el encarcelamiento y los juicios políticos arbitrarios que lesionan los derechos humanos (de eso también habla el Documental que anexamos).

Por último, lanzo la siguiente hipótesis: Guzmán ha muerto. No le han dejado a su cónyuge ver el estado de salud mientras vivía. Una vez muerto Guzmán, no le han permitido ver el cadáver ni entregarle el cuerpo. En las últimas imágenes de Guzmán siendo trasladado al hospital naval no se le ve con una salud deteriorada ni que estuviera gravemente. Sale caminando con otros luchadores sociales y el genocida y terrorista de Estado Vladimiro Montesinos. Después de un mes muere Guzmán. La prensa difunde en ese lapso que está gravemente pero no es congruente con las imágenes. La prensa le pide a Pedro Castillo y a sus ministros que deslinde de Guzmán. Ellos obedecen. El golpismo ha sido desechado porque el gobierno no es senderista su principal excusa para tumbarse a Castillo. Por lo tanto, la muerte de Guzmán ¿no fue inducida mientras estuvo en el hospital para tumbarse al gobierno de Pedro Castillo y el golpismo tenga un asidero? ¿La Marina tiene que ver la muerte de Guzmán? Hipótesis: Han querido tumbarse al gobierno de Pedro Castillo con la muerte de Guzmán, quien fue asesinado. Réquiem por Guzmán